Voy a explicarte en que consiste este camino desde distintos puntos de vista y darte algunos aspectos a evitar para vivirlo correctamente.
El Arcano Mayor representado en este camino es: El diablo.
El Diablo, la antítesis del Cordero de Dios. Personifica al hombre que vive sometido al instinto y a la degradación, que únicamente puede sentir deseos carnales, materialistas y egoístas.
Su cuerpo mezcla las partes negativas de los cuatro elementos:
–Tierra (reino físico): El color marrón de su cuerpo = la codicia, la dependencia de las posesiones materiales.
–Aire (reino mental): Alas de murciélago = la división de la mente que crea confusiones caóticas.
–Fuego (energía vital o del deseo): Las patas de cabra = desear sin juicio ni sentido común.
–Agua (reino emocional): Sus garras = dejarse controlar por las emociones.
En la frente el pentáculo invertido representa el hombre con el juicio entorpecido.
La antorcha encendida no da luz, sino el fuego de las bajas pasiones.
Esclavizando al hombre y la mujer con cadenas lo suficientemente amplias para que se las puedan quitar, no lo hacen, ya que se esclavizan a sí mismos.
No se ve en ningún caso la luz.
La oscuridad engaña nuestros sentidos y no nos permite ver la verdad ni de mí, ni de lo que me rodea.
Este camino discurre del centro espiritual medio a la fuerza Yang inferior en el Árbol de la Vida. Nos acompañan las fuerzas del Sol y Mercurio.
Es llamado el camino de la “Renovación” y se trata realmente de renovar nuestras actitudes en las acciones que llevamos a cabo en nuestra vida cotidiana. ¿Desde dónde hago las cosas? Sin autoengaños…cuando nadie me puede ver…
¿Soy impecable en mis acciones?
Es el darse cuenta de lo que no hago desde la Luz, para intentar el enfoque. En resumen es quitar lo endiablado de mis pensamientos usando el amor para vencer a la oscuridad.
No dejarme llevar por el egoísmo de la materia para conseguir mis objetivos.
Ver lo que hay detrás de cada acción que llevo a cabo sin engañarme, para ir mejorando como célula del universo que soy y poder poner más peso en el proyecto común que en el particular: No aprovecharse de las situaciones sabiendo que quizás no son justas y están repercutiendo negativamente a otros seres.
Es el reconocimiento de negar lo negativo, la inconsciencia (el Diablo) y evitar las fuerzas negativas conscientemente.
La lucha constante y consciente contra la oscuridad.
Personas que reconocen las cosas que están mal y quieren cambiar activamente lo negativo (la oscuridad) por lo positivo (la luz).
Pueden ser muchos tipos de personas, aunque todo es desde donde se hacen las cosas, “de verdad” dándose cuenta de la repercusión que tiene su acción: Jardineros, campesinos, protectores del medio ambiente, educadores, terapeutas, personas que trabajan con ángeles…Gente que quiere aportar y ponerse al servicio de los demás sin mirar solamente por ellos mismos, cambiar el YO por el NOSOTROS.
Si tienes este camino como el de transformación, te voy a dar algunas pistas para ayudarte a vivirlo más conscientemente.
Aspectos negativos (evitar): Estar atrapados en la maldad (magia negra). Ataduras que no me dejan ser libre, anclándome a la materia (modas, hipotecas…) Envidia insana por no poseer tener algo material
Reflexión: “¿Desde dónde estoy haciendo las cosas? ¿Estoy siendo impecable con mis acciones?”
