También llamados los 72 ángeles o genios de la cábala.

Empezamos una nueva etapa.

Sabemos que las cosas se están acelerando y cada vez más… Muchas veces, personalmente tengo la sensación de estar en el centro de un torbellino y de no saber muy bien si estoy donde “tengo que estar”, haciendo lo que “tengo que hacer”, acompañado de una profunda sensación de irrealidad y un mezcladillo de emociones a flor de piel… en definitiva noto grandes movimientos energéticos. El tema es que este año noto más movimientos que otros anteriores, no sé si es porque tengo otra conciencia o por lo que se nos viene encima…

El invierno ha acabado y la primavera ha entrado con mucha fuerza este año. Aries, el impulsor, el iniciador, se hace notar: ha entrado pisando fuerte con un eclipse solar y hoy se igualan los días y las noches, los celtas llamaban a este momento “Ostara” (equinoccio de primavera: 20 – 21 Marzo)

Ostara celebra que los días y las noches son igual de largos, es un tiempo de equilibrio y cambio hacia la abundancia y exteriorización. Las fuerzas masculinas y femeninas de la naturaleza están igualadas, es una fiesta de fertilidad, amor y equilibrio.

Pero principalmente me he animado a escribir estas líneas, porque cabalísticamente hablando, a partir de hoy también empieza un nuevo ciclo: el 21 de Marzo es el día por el que empieza a nivel astrológico el programa de los 72 Nombres de Dios, los llamados ángeles o genios de la cábala.

Por supuesto decir que no pretendo adoctrinar ni inculcar ninguna “verdad”, ni tan siquiera demostrar nada, cada uno debe valorar si todo esto le vale o no… lo único que hago es poner a disposición de todas las personas interesadas algo que pienso que nos puede ayudar en nuestro camino hacia nosotros mismos.

Los 72 nombres de Dios.

Sin quererme extender mucho, porque no acabaríamos nunca, me gustaría hacer una breve introducción para podernos situar y comprender el concepto principal de este conocimiento que mucho tiempo ha sido hermético.

Sabemos que todo en el Universo es energía y toda esa energía está en movimiento. Nosotros estamos formados por la unión de varias energías (3 en concreto) y estamos inmersos en un mar energético que nos conecta absolutamente con Todo. Recibimos constantemente influjos que provienen de los astros, según la posición de éstos, etc… y ello incide en nosotros, generándonos distintos estados que podemos sentir según la sensibilidad que tengamos,

Pues bien, la astrología cabalística desde la antigüedad, ha descubierto que junto con la energía que nos llega del centro de Universo, viene una información “troceada” a lo largo del año solar, y estudiando esta información en profundidad, ha conseguido clasificar a estas irradiaciones energéticas (que duran aprox. 5 días) en 72 “paquetes de información energética”.

Teniendo conciencia de esto, sabiendo la información que nos llega en cada momento y abriéndonos a trabajar con ella, recibimos una ayuda “extra” en nuestro camino de evolución como seres de Luz que somos. Ya que la energía la recibimos SIEMPRE, seamos conscientes o no… el tema es que si somos conscientes podemos utilizarlas y si no los somos, nos “utilizan”. A estas energías, que tienen conciencia propia y nos transmiten mensajes, se les ha dado en muchas civilizaciones antiguas el nombre de ángeles (angelus = malak = mensajero) y de hecho son una parte energética de ellos, de las que se desprenden para ayudarnos a evolucionar.

Se representan normalmente y para facilitar el trabajo con ellas, como la combinación de 3 letras hebreas (símbolos que pueden emitir por sí solos ondas de forma) o también su transliteración añadiendo un sufijo IAH o IEL. Curiosamente y como dato para los que quieran investigar más sobre el origen de los mismos, todos los nombres se han sacado en la antigüedad analizando cabalísticamente el texto de un pasaje del Éxodo (Ex 19:20-21). Los cabalistas lo denominan la “Shemanphorash”.

 

 

Hay  varias formas de utilizar y trabajar con estos nombres: visualizaciones, meditaciones, invocaciones, plegarias, velas, etc… Muchos cabalistas actuales han hecho magnos esfuerzos recopilando gran cantidad de información y describiendo métodos muy útiles que facilitan y simplifican el trabajo a hacer, entre ellos destacaría a Kabaleb y Yehuda Berg, cada uno en su línea… ya que han desarrollado métodos distintos.

Método de trabajo.

Personalmente más en la línea de Kabaleb, describo aquí el método a mi parecer, más simple y efectivo:

1)  Leer y entender las características del Genio que rige ese día y saber lo que proporciona, teniendo conciencia de que esa energía está ese día actuando con nosotros.

2)  A continuación leer en voz alta la plegaria (un texto que se usa para abrirnos e interiorizar esa energía) y después durante algunos minutos meditar en lo que estamos pidiendo con el texto que hemos leído.

Sobre el trabajo, lo que a mi parecer es importante es cumplir con estos puntos:

·         Hacerlo diariamente (Al menos 15 minutos)

·         No tener expectativas, simplemente hacerlo.

Mucha Luz, conciencia y fuerza!