Eres un ser único
No hay dos rosas iguales, ni tampoco hay dos olas del mar exactamente iguales… De la misma forma no hay dos seres humanos idénticos ni en su forma, ni en su fondo.
Aunque a nivel biológico somos únicos, en este texto voy a hablar en términos metafísicos, es decir más allá de la apariencia física, traspasando el plano de la materia para irme a un plano más profundo de la existencia como tal.
Cada un@ de nosotr@s somos una chispa de la Conciencia Infinita buscando encontrar nuestra propia y singular forma de relacionarnos con el “mundo”. El trabajo aquí consiste en hacerlo de forma individual en esta ilusión de separación con el Todo. Hasta aquí puedo entender que hay tantas maneras de relacionarse con el mundo como personas en él… si solo hubiese una forma de hacer algo, solo habría una persona.
Cada persona es única e irrepetible en el Universo, lo que puede aportar y desde donde lo puede hacer solo le corresponde a ella.
El lío se monta cuando desde pequeños recibimos condicionamientos para ser TOD@S de la misma forma y hacer las mismas cosas, sin llegar a conocernos profundamente debido a estos condicionamientos de como “tengo que” ser. A eso que se forma y que me creo que soy aunque relamente NO-SOY, se le conoce como la personalidad, el EGO y también el NO-SER.
Y al construir esa imagen mental condicionada de como tengo y no tengo que ser, me pierdo profundamente de mi mismo, de mi esencia genuina, única e irrepetible. Esto lleva a grandes estados de insatisfacción porque pienso, siento y actúo a nivel INCONSCIENTE sin SER quien soy realmente.
Se me genera un gran vacío interior, sufro cada cierto tiempo crisis existenciales, tengo sentimientos de desubicación en el mundo y un agotamiento energético bestial porque gasto mucha energía manteniendo esa “personalidad” ya que es como si fuera manteniendo una pesada carga en lugar de fluir. A veces el cuerpo me susurra, me habla en voz alta… me grita… para que sea consciente de que algo no está funcionando, y si según dice el ayurveda, la cábala o el Dr.Edward Bach: Si desoigo al cuerpo aparecen problemas físicos, emocionales o mentales… ya que cuando la energía está en desequilibrio, enfermo.
Para que la energía fluya de manera correcta, el trabajo es saber quien soy, para ver que es lo que estoy haciendo en contra de mi mismo… Si no hago este trabajo de autoconocimiento seguiré sin saber que es lo que pasa en mi vida.
Ya lo decían en la antigua Grecia: “Conócete a ti mismo”
Este es el más importante de los trabajos a hacer, conocerme sin engaños de manera profunda. Eso me libera de cargas, de introyectos (tengo que…) de compararme con otro: Soy incomparable, porque ¡soy Único!
Y cuando empiezo a quitar las capas que me he puesto encima, me libero de todas las creencias de lo que creo ser y voy viendo realmente quién soy, llega el segundo renacer al que se refería el Maestro Jesús…para entrar en el Reino de los Cielos.
“Te aseguro que si una persona no nace de nuevo,
no podrá ver el reino de Dios”
¡Buen renacer!